IOSHUA live Posadas Misiones

IOSHUA habla para CANAL ENCUENTRO Argentina

martes, 22 de diciembre de 2009

IOSHUA, en vivo

IOSHUA, en vivo en el sotano de PROFONDO ROSSO en la presentacion del libro LOMA HERMOSA (ed. NULU BONSAI) video realizado por AJÍ.

jueves, 17 de septiembre de 2009

GOLAZO AL CORAZÓN



- pasamela pasamela puto

- corre corre muerto dale corre

- dale puto que te cabe

- dale dale dale guachin

- pasamela pasamela dale dale

- tuya puto dale

- gooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooool! Goooooooooooool!


Los chicos corren un poco mas y se abrazan. Es tan lindo todo eso. Es como salir a buscar eso que no se animan a decir. El calor y la felicidad de todos juntos. Se hacen jueguitos. Una mano que te despeina ... una palmada en la cola. Los pechos cerca y el aliento agitado en los cuellos. Las manos suaves apenas pasan por la cintura. Todo muy masculino... muy viril. Nadie se imaginaria ni pensaría otra cosa. Que desubicado. Es festejar nomás. Por eso se abrazan y se dan palmadas en la cola. Por festejar el calor y la felicidad de estar juntos y hacer algo bueno para ellos. Gol. Ya van 2 a 4. Los chicos se abrazaron mucho esta tarde. Es tan lindo todo eso.


Maurito es el mas lindo del equipo. Un pibe re bien cuidado como dice su papá. Todos dicen que es el mas fachero del equipo y saben que es verdad. Los otros varones saben reconocer la belleza entre ellos. Lo joden con esa rara intención de señalar cosas lindas del cuerpo de Maurito... sus labios, las piernas. Pero solo como un jueguito nomás. A mi me gusta verlo cuando llega en bici con su papá. El tipo es muy cuida del pibe. Quiere que sea un gran jugador bien famoso y millonario... pero Maurito solo parece jugar apenas mejor que el peor de los demás del equipo. Pero su papá lo cuida mucho. Los dos vienen en bici y andan por el vestuario. Maurito me saluda y hablamos un rato mientras él se cambia... es lo mejor. Porque se desviste delante mío sin intención aparente de calentarme... quien pensaría eso? Maurito se cambia el pantalón y la remera. Ya conozco todos sus calzoncillos y sé cuando trae uno nuevo. Su cintura es perfecta. Su pecho también es perfecto y es lampiño todavía. Su color es trigueño y es perfecto, suave... como cafecito con leche. Asi es Maurito. Lindo nomás. El mas fachero del equipo. Y eso los otros lo saben y lo joden y le hacen jueguitos. Quien pensaría que lo hacen con algo de calentura. Bueno, si ya se... soy un desubicado.

Roberto es el veterano del equipo. Arquero de toda la vida según dice. Lo suyo es gritar y no parar de gritar ni un momento. En la vereda, en el patio, en el vestuario y sobre todo en la canchita. Es un tipo exagerado y muy nervioso. A mi a veces me fastidia por demás y no le doy bola. Es alto y morocho. Tiene una cicatriz chiquitita en el mentón. Es fuerte y todo el tiempo habla de eso. Es profesor de tae-kwondo. Tiene como 34 años. Casado, separado y casado de vuelta. Siempre viene a los partiditos con alguna minita que se levanto por ahi. Dicen que es medio violento con las minas. Yo no se. Cuando lo veo desnudo el tipo te mira y te mira todo. No disimula. Parece que le gusta. Que se yo. Una vez me dijo que borracho le chupo la pija un puto. Me lo contó mientras se acomodaba mucho el calzoncillo. Parece que disfrutaba su recuerdo. Yo no se. No me calienta el tipo. Pero siempre lo veo mirando el cuerpo de los otros varones en el vestuario. Quien pensaría que lo hace con algo de calentura. Bueno, si si ya se... YO soy un desubicado.

Cubito. Así le dicen a otro de los pibes del equipo. Cubito es el pibe mas sencillo que conozco. Su vida solo pasa por la playstation, el msn y las pibas. A él nada le preocupa. Todo es simple en su cabecita bobalicona. No duda de nada y eso le da firmeza en la voz. Los otros varones lo cargan todo el tiempo y se burlan de su simpleza para vivir. A Cubito no le podes pedir que piense. Solo que haga y ya. Es un morochito hermoso. Medio petiso pero muy hermoso el guachin. La mirada clara... casi sin nada que decir. La boca húmeda... casi sin nada que decir. Pero que me importa eso a mi. Cubito es un encanto de varón tan masculino y sencillito. En el vestuario es un poco pudoroso. No tímido. Pudoroso. Pero se desnuda que es un encanto el pibito. Nunca levanta la mirada cuando esta en el vestuario. Solo se cambia su ropa y sigue en lo suyo. Y cuando termino de vestirse sale al patio y listo. Tiene un lunar bonito en el medio de la espalda. Nunca se lo dije. Que se yo. A lo mejor si le digo eso alguien escucha y pensaría que me fijo mucho en la espalda de los pibes en el vestuario y todo eso. Y a lo mejor alguien pensaría que me caliento con ellos ahí desnudos en el vestuario... pero QUIEN pensaría que lo hago con algo de calentura. Bueno, si si ya se... YO soy un desubicado.


Se levanto un poco de viento. Son re lindos los días a esta hora. Este verano viene genial con algo de viento. Hay algunos mas como yo sentados en las gradas. Seremos 15 en total. No mas. Yo vengo a acompañar a David. Los otros 14? Yo no se. Las minitas es obvio que vienen a seguir a sus NOVIOS. Bueno... cada cual lo suyo.


- pasamela pasamela puto

- correlo correlo dale correlo puto

- dale puto uy sos horrible

- dale dale dale guachin

- pasamela pasamela dale dale

- tuya puto dale

- gooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooool! Goooooooooooool putos! Goooooooool!



Uy pero esta vez del otro equipo. Pero ellos también corren un poco mas y también se abrazan y también es re lindo todo eso. Es como que ellos también salen a buscar eso que no se animan a decir. El calor y la felicidad de todos juntos. Se hacen jueguitos. Una mano que te despeina ... una palmada en la cola. Los pechos cerca y el aliento agitado en los cuellos. Las manos suaves apenas pasan por la cintura. Todo muy masculino... muy viril. Muy rápido para darse cuenta de todo. Nadie se imaginaria ni pensaría otra cosa. Que desubicado. Es festejar nomás. Por eso se abrazan y se dan palmadas en la cola. Por festejar el calor y la felicidad de estar juntos y hacer algo bueno para ellos. Gol. Ya van 3 a 4. Los chicos se abrazaron mucho esta tarde. Es tan lindo todo eso.
Pero a David le molesto eso. Esta de mal humor desde el mediodía y siempre se pone peor cada vez que le hacen un gol a su equipo. Pero no es para tanto. Cada cual lo ve de un modo diferente. Y yo solo estoy acompañándolo desde las gradas y disfruto del viento que se levanto, de los días a esta hora y gritar gooooool y ver como todos ellos corren un poco mas y se abrazan y es re lindo todo eso.

En el equipo de David hoy juega Marcelo, un amigo de ellos. Un pibe medio raro. Muy callado. Marcelo viene solo cuando otro no puede, entonces ahí recién lo llaman y él se viene a jugar un partidito. Nadie es muy amigo de él pero siempre es el único que viene cuando les falta uno cada domingo. Marcelo es un rubio hermoso. Hijo del panadero de la esquina y un flaco re lindo desde pibito. Tiene esos ojazos celestes que siempre cautivaron a todos en el barrio. Además a veces lo veo por ahí cuando va o viene del gimnasio. Es musculoso el pibe. Hermoso por donde lo mires. Alto. Y solo cuando viene a jugar con los pibes tengo la maravillosa oportunidad de verlo un poco desnudo. Es un placer todo eso. Ese cuerpo musculoso y radiante. Parece un sueño imposible hecho varón en el barrio. Usa unos boxers bien apretaditos. Siempre. Y su piel es una delicia de radiante... todo el pibe es radiante. Muchas veces soñé cosas sensuales con él. Desde que éramos chicos. En carnaval cuando salíamos a jugar echándonos agua por la cuadra yo me embobaba mirándolo todo mojado y radiante al sol, sin remera, y con unos shortcitos maravillosos. Ay Marcelo. Que hermoso varón. Y cuando juega en la canchita es algo que me tiene embobado. Corre. Corre. Patea. Hace buenas jugadas. Corre. Corre. Siempre serio. Dicen que es gay. Yo no se. A lo mejor. Que afortunado es el pibe que enamoro a Marcelo! Toda esa belleza es una fortuna... para quien la porta y para quien la goza, por supuesto. Yo solo puedo admirarlo nomás y así, agitado cada domingo corriendo en la canchita, es hermoso por donde lo mires.

Fernando es otro de los pibes del equipo. Un pibe re copado. Él viene como suplente. Si alguno de los otros pibes se lesiona o algo, ahí esta El Fernando para entrar a jugar. Él gordo se la re banca y corre y no se queda quieto ni un poco. Dicen que es el mas divertido para jugar porque todo el tiempo esta inventando chistes y es muy simpático. Es enorme. Y corre y corre cada pelota y pega unos pelotazos terribles. Algunos le tienen miedo. Fernando dice que a veces no sabe medir su fuerza ni su tamaño y por eso a veces tira a alguno en la cancha. Sin mala onda dice él. Pero es un personaje el gordo. Además en el vestuario es el fenómeno! Tiene una pija enorme y siempre busca cualquier oportunidad para mostrarla y hacer jodas. Le encanta su pija parece... y en el vestuario es el rey. Estuvo preso por robo muchas veces y cada tanto que desaparece del barrio ya es porque volvió a la cárcel. Alto chorro El Fernando. Enorme de todos lados. Un morochazo jodido como dicen por ahí. Pero todo bien... cada cual lo suyo.

- pasamela pasamela dale dale

- correla guacho correla

- dale puto que te cabe

- dale dale dale guachin

- pasamela pasamela dale dale

- tuya puto dale

- gooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooool! Goooooooooooool! Goool guachin gol!


Gooool! Los chicos corren un poco mas y se abrazan. Ya cansados. Pero aun así es tan lindo todo eso. Es como salir a buscar eso que no se animan a decir. El calor y la felicidad de todos juntos. Se hacen jueguitos. Una mano que te despeina ... una palmada en la cola. Los pechos cerca y el aliento agitado en los cuellos. Las manos suaves apenas pasan por la cintura. Todo muy masculino... muy viril. Nadie se imaginaria ni pensaría otra cosa. Que desubicado. Es festejar nomás. Por eso se abrazan y se dan palmadas en la cola. Aunque ya estén bien cansados. Pero es por festejar el calor y la felicidad de estar juntos y hacer algo bueno para ellos. Gol. Ya van 3 a 5. Los chicos se abrazaron mucho esta tarde. Es tan lindo todo eso. Y sigue un rato mas el partidito. Pero ya están todos cansados y muy abrazados por hoy. Ya pueden volver a sus novias con suficientes roces de varones en la piel. Les alcanzara hasta el domingo que viene... y si alguno no se aguanta, bueno ya sabrá que hacer... cada cual lo suyo.

David sigue de mal humor a pesar de estar ganando con su equipo de amigos. David es mi chico... mi novio. Digamos. Es que siempre estamos peleando por todo y parece que ya deberíamos separarnos y empezar historias nuevas cada uno por su lado.
Antes de venir para el partido volvimos a pelear no se porque pavada... como todos los días. Peleamos por pavadas. Pero ninguno hace nada por dejar al otro. Después todo se arregla y seguimos y nos amamos mucho muchísimo y por cualquier pavada volvemos a pelearnos. Yo lo amo. En serio. Mucho muchísimo. Pero a veces me pregunto que hacemos juntos hace tanto tiempo peleándonos tanto casi todos los días. David es maravilloso. Todo un varón por donde lo mires. Nos conocimos en otra canchita de por acá nomás. Yo estaba ahi de casualidad y nos vimos y nos reconocimos del barrio y empezamos a hablar y asi se dieron las cosas. Empezamos a salir y al poco tiempo ya habíamos decidido alquilar algo para vivir juntos y pasar todos los días uno encima del otro. Todo muy serio. Todo muy maravilloso. David cocina de lo mejor. Somos muy desordenados y eso casi siempre es uno de los motivos de pelea... pero somos muy desordenados nomás. Ronca mucho por las noches. Le gusta ver televisión todo el tiempo y se engancha con todas esas pelotudeces de la televisión. Es fanático de Nirvana y Megadeth. Se le hacen hoyuelos en las mejillas cuando ríe. Es un poco mas bajo que yo. Nació en Córdoba pero su familia se vino a Buenos Aires cuando el tenia 9 años. Tiene ojos marrones. Hermosos ojos marrones. Les gusta tomar cerveza. Una vez se quebró una pierna cayendo de una moto en una ruta. Sabe hacer asados. Dice que los Rolling Stones son la mejor banda de la historia. Tiene un pantalón negro que le queda maravilloso. Tiene un tío que dice que conoció a Luca Prodan. Su papá fue policía... de esos malos. Me contó que una vez cuando era chico lo pico una víbora en la pierna y que lloro un montón de días por eso y que falto al colegio y cosas así. Tenia un perro marrón que se llamaba Bichu, que se murió comiendo una rata o algo así. También me contó que una vez hizo EL gol de su vida en un partidito con sus primos y hasta el día de hoy dice que se lamenta de no poder volver a repetir esa jugada. David trabajo en una pizzería en Santiago de Chile cuando estuvo vagabundeando por allá. Tiene una hermana que sabe patinar sobre hielo y otro hermano que toca la guitarra en un grupo folclórico en Junín. Ah! Y una vez David me contó que de chiquito le tenia terror a E.T. y que tenia pesadillas, si si con ese marciano marrón petiso que tenia un dedo luminoso, y que por eso no puede ni ver esa película porque le daba miedo el marciano E.T.

Paró el viento. Son re lindos los días a esta hora pero este verano no será genial sin algo de viento. Todavía hay algunos mas como yo sentados en las gradas. Seremos 10 en total a esta hora. No mas. Yo vengo a acompañar a David. Los otros 9? Yo no se. Las minitas es obvio que vienen a seguir a sus NOVIOS. Bueno... cada cual lo suyo.

David no sabe andar en bici, por eso siempre lo llevo yo. Dice que sabia pero que se olvido como hacerlo. Que tenia una bicicleta roja media fea que le habían regalado para un cumpleaños y que andaba por todos lados en el barrio pero que no sabe como un día se olvido como hacerlo y ya no anduvo mas en bici. Ni en esa bici roja fea que le habían regalado ni en ninguna otra. Nunca mas. Y por eso yo siempre lo llevo en mi bici. David sabe bailar hiphop... así bien bien, haciendo piruetas y todo. Lo hace solo a veces y para mi es un encanto.

Bueno, volvió a correr vientito y termino el partido. Listo por hoy.
Los chicos ya corrieron y se abrazaron. Y fue tan lindo todo eso. Fue como salir a buscar eso que no se animan a decir. El calor y la felicidad de todos juntos. Se hicieron jueguitos. Una mano que despeina ... una palmada en la cola. Los pechos cerca y el aliento agitado en los cuellos. Las manos suaves apenas pasan por la cintura. Todo muy masculino... muy viril. Nadie se imagino ni pensó otra cosa. Que desubicado. Fue por festejar nomás. Por eso se abrazaron y se dieron palmadas en la cola. Todo fue para festejar el calor y la felicidad de estar juntos y hacer algo bueno para ellos. Los chicos se abrazaron mucho esta tarde. Y fue tan lindo todo eso. Y termino el partidito. Ya están todos cansados y muy abrazados por hoy. Ahora al vestuario a las duchas, y después unas birras en el kiosquito de la esquina. Charlar y joder un rato.
David me mira y me hace seña de irnos. Todo bien. Vamos a casa.
Los demás ya pueden volver a sus novias con suficientes roces de varones en la piel. Les alcanzara hasta el domingo que viene... y si alguno no se aguanta, bueno ya sabrá que hacer... cada cual lo suyo.






FIN

miércoles, 16 de septiembre de 2009

ME MUERO POR CHUPARTE LA PIJA

Pablo,
un día te dije algo horrible que. Te hice llorar y lloramos juntos.

Yo soy una desgracia y siempre lo arruino todo, pero vos sos re bueno, un capo, un bombón.
Se que ese día me zarpe.

Sos el pibe mas lindo: casi despeinado, las zapas siempre con barro y esa mirada achinada por el porro. Sos hermoso, pero ni así me rescate y ese día te dije algo horrible que te hizo llorar y lloramos juntos, mucho.

Pero me pareció que no llorabas solo por lo que te dije ¿porque más lloraste vos?
Yo me largue a moquear porque te vi herido y llore mucho mas porque fui yo el que te lastimo, pero también llore por una bocha de cosas; tuyas, mías, que se yo... mi vida es una re secuencia, ya sabes.

No me olvido que estuvimos así un rato hasta que te calmaste. Yo solo te acariciaba el pelo. Ya no había música, el disco de LOS PIBES CHORROS se había terminado hace un toque.

Che, un día te dije algo horrible que nos hizo mierda y nunca te pedí perdón. Vos sos re bueno y me la dejaste pasar, no me dijiste nada y eso me hizo re mierda, sabelo.

Capaz fue eso y algo más lo que me termino de quemar ese día ¿o ya era de noche cuando llegue a tu casa?

Pablo, te bese tantas veces, tantas. Tantas como pude, siempre; pero ese día quise poder mas que nunca. Capaz así creía que iba a borrar mi cagada, que gil que fui.
Che, me entera que estuviste con EL URUGUAYO y que casi caes con el cuando los ratis le reventaron el rancho. Me puse re loco man.

¿Como te enganchaste con ese tranza? ese Urugua es un re gato, yo todavía tengo bondi con ese pinta. Le cabio por mulo.
Ta, ya fue, estoy bardeando otra vez. disculpame, me fui de boca.

Me dijeron también que ahora estas mas tranca, que estas en la casa de tu hermano. Estoy seguro que el te cuida bien, FER es un capo total.
¿Que fue de mi historia? la mía va por el mismo camino. También tuve algunos bondis con la gorra pero ya esta todo tranca, en serio.
Ahora estoy parando acá cerca de tu casa, venite. Estoy en lo del MARIANITO, el primo de CHACHE. Venite.
Ayer casi me paso por lo de tu hermano pero no me dio ir re careta, que se yo. te deje re mal la ultima vez y capaz que no queres ni verme, pero yo si quiero verte. te debo un par de palabras que nunca te dije por gil, por vivir re loco, por boludo que soy.
Siempre tengo en la cabeza todo lo que vivimos juntos.
Y tu sonrisa (la más bonita de todo el barrio), las tardes en las piletas del muni, cuando se me re paraba cada vez que me abrazabas frente a los pibes del deportivo, y lo más valioso: cuando cojiamos escuchando a EL GRUPO AVENTURA, altas noche Pablo.

Che, quiero verte. Quiero decirte todo. Quiero decirte esas palabras que vos siempre me dijiste con la voz mas dulce y que yo nunca te devolví:
Che, Pablo, me muero por chuparte la pija.

CABALLOS DE NOCHE

Marcos y Federico son muy felices juntos pero deben separarse por un ajuste de cuentas entre dealers. Cocaína, cervezas, dos petacas de whisky, un Falcon a Córdoba y la historia mas romántica de Ioshua.





Fede y yo estamos sentados en el piso de su pieza, encerrados y ya tomando la segunda birra. Su mamá salio a bailar con Alberto (el nuevo novio) y su hermana esta en su pieza con el noviecito.

Fede – ufff boludo estoy re al mango. Te re extrañaba mal, boludo, un montón. Mirame como estoy re al palo por vos. No te imaginas como te quería ver y estar con vos, locura. Te re extrañaba.

Transamos a full. Yo nos sacamos las remeras y nos desabrochamos los pantalones. Re transamos, tomamos birra, reímos, estamos re al palo los dos. Franeleamos a pleno. Todo bien pero hace unos días que no nos veíamos y me llamo porque quería decirme algo importante.

- yo también, loco. A full te re quería ver. Menos mal que me llamaste hoy. Ya ni me aguantaba ¿Qué onda? La Yamila me dijo que me querías decir algo, no?

Fede medio que se hace el boludo y no me responde. Me pone el pico de la botella en la boca y la empina dándome un trago de birra. Todo bien pero ¿Qué onda? Lo apuro.

- dale amor, que querías decirme? No me des vueltas. Dale, decime. No vas a mandar a tu hermana a buscarme con una excusa, no? Fede, no?

Me abraza. “te re extrañaba mucho” me dice y me besa y me abraza bien fuerte.

- fede, para para. No me respondes. Decime lo que me querías decir ¿Qué onda? Larga, dale. Lo apuro buscándole la mirada.

Fede - …ahora no, marcos. Dale. Dame un beso. Después te digo, en serio. Ahora no. Besame, loco. Abrazame fuerte, dale.

Transamos. Nos quedamos abrazados. Como que nos pinto un viaje medio bajón. Así, abrazados re tierno como que algo triste nos mantiene ahí acariciándonos re suave. Fede respira muy suave y después de un ratito así me dice “marcos, me voy”.

-¿Qué?

Fede – si. Si… mañana, bah en unas horas me rajo para Córdoba. Mi vieja consiguió que un tío me aguante allá un tiempo. Tengo que zafar, sabes.

- pero… ¿Cómo que te vas?

Fede – si, amor. Tengo que tomármelas de acá. Vos sabes muy bien la historia con el gordo Pilo… y bueno, apareció un tío allá que me va a tener un tiempo a ver si mientras se aclaran las cosas por aca. Me dice agarrándome la cara y besándome.

- …pero… para para ¿vos hablaste algo con alguno de la familia o algún pierna del gordo ese? ¿vos dijiste lo que sabes? Por favor decime que si.

Me abraza fuerte.

Fede - no, amor. No hay caso ya lo intente. El Pilo esta re envenenado con que yo lo mande preso con su historia del Uruguayo, el tranza de la villita. No quiere entender que yo no tuve nada que ver niai, vos lo sabes eso. Bueno, el gordo la tiene conmigo y no quiere entender nada. Ya hable con su hermano mayor y con El Peca, pero me dijeron que el gordo me va a romper todo y que no se convence de nada. Esta zarpado en gil ese chavon y yo ya no puedo pasármela escondido acá. No puedo ni vivir, te das cuenta? Ya ni puedo verte ni estar con vos como antes. Ahora estoy acá refugiado y trasca no tengo nada que ver con esa historieta que me inculpan. No da así. Mi vieja esta re furiosa conmigo y dice que ya esta cansada de mis cagadas y por eso me manda para Córdoba mañana. Me va a llevar mi primo que se vuelve para allá y de paso me lleva. Yo estoy hecho mierda mal. Me estoy comiendo un re garrón por una gilada. El gordo Pilo siempre me tuvo bronca desde pendejos pero se agarro cualquiera para joderme mal. Ese gordo vive con fierro. El hermano me dijo que iba hacer lo que pudiera pero me advirtió que El Pilo me quería meter un corchazo para cobrarce que se le acabo el teje en la villita. Yo no tuve nada que ver, mi amor, no puedo mas. Capaz que si me voy un poco ese gordo tranza se pone las pilas y me deja de joder la vida. Yo te amo, posta, pero me tengo que ir por eso te quería ver hoy si o si y la mande a mi hermana a que te busque. Mi vieja salio con su macho porque sabia que te tenia que ver y decirte esto…

- pero… yo no entiendo nada… vos te vas…


Fede toma un poco de cerveza y tiene los ojos como que va a llorar. Se pasa la mano por los ojos.

Fede – todo mal, amor. Todo re mal esta historia. Cualquiera. Yo no hice nada, vos lo sabes. Yo soy cualquier cosa menos buchon de la yuta, vos lo sabes. Yo te amo posta, un montón mal. Yo te amo y pasa esto con ese gordo tranza. Ese chavon esta re zarpado de merca mala por eso ya no puede ni pensar ni entender nada. Che, marcos, para ¿estas llorando?
Se me caen las lagrimas . no entiendo nada. Me dice que me ama pero se va.

Fede - no no no amor, por favor no llores. No llores, mi amor…

Me dice abrazandome muy fuerte y llorando. Repite “no llores, mi amor” mil veces, llorando. Lloramos. Yo no entiendo nada. Me dice que me ama pero se va.

Fede – por favor no no llores mas, mi amor. Mira mira tengo merca. Nos tomamos una bolsita, si? Pero no llores, por favor mi amor.

Fede busca rápido en su bolsillo del lompa y saca la bolsita. La tironea entre los dientes como nervioso, la abre y con una moneda carga un poco y se toma un tiro. Sigue pidiéndome que no llore y me pone la moneda con merca debajo de la nariz. Jalo, sonríe y me abraza. “no llores, mi amor” me pide llorando. “no llores mas. Tengo otra bolsita. No llores, mi amor.” Me abraza y me besa. Yo solo no puedo para de llorar. No entiendo nada. Me dice que me ama pero se va.
Nos quedamos ahí. Abrazados.

Fede - ¿estas mejor? Marcos, estas mejor?

- vos te vas. Sos una mierda. Me abandonas. Sos una mierda.

Me busca la mirada, me besa, me toca la pija y me busca la mirada.

Fede – Marcos, estas mejor?... ¿me cojes?

Se sonríe. Me besa. Me muerde el cuello. Se me esta parando. Él ya esta el palo otra vez pero se acomoda la pija y se sube el pantalón. “ahora vengo” me dice y se levanta, abre la puerta y sale. Yo me quedo ahí, me incorporo un poco y me recuesto en su cama. Fede vuelve con una botella de cerveza en la mano y gritándole a su hermana “…vos cortala, Yamila. No me rompas las pelotas. No jodas y cortala, pendeja…” y cierra la puerta de un golpe. Destapa la botella con las muelas, toma un trago y murmura “…que pendeja conchuda…” mientras saca del bolsillo la bolsita de merca.
La abre, carga un poco en un amoneda, me la acerca a la nariz y jalo. “te amo” me dice y toma un largo trago de cerveza y me empieza a chupar la pija. Curtimos.


Con Fede siempre hablamos mucho de bocha de cosas. A veces son giladas nomás pero casi siempre hablamos de cosas muy nuestras, muy de nuestras vidas. Hablamos de nuestros viejos, de cuando éramos guachos, de lo que nos imaginamos sobre un montón de cosas que quizás algún día nos ocurran y todo eso. Pero hoy no. Curtimos y nos quedamos ahí, yo abrazado a su pecho. Siempre hablamos tanto y ahora estamos tan callados.
Fede se va y yo no entiendo nada. Quiero tomarme otro pase de merca pero mejor me quedo acá, así, juntos. Por la cabeza me pasan un montón de secuencias… no se, solo pienso en él. Nos quedamos ahí acostados, yo abrazado a su pecho. Callados, quizás horas, casi dormidos.
De repente nos despiertan unos golpes despacios en la puerta y la voz de Julia (la mamá de Fede) que lo llama desde el otro lado de la puerta. “Federico. Federico, podes venir?” Fede se levanta, se pone el lompa y sale. Yo me levanto, agarro la bolsita de merca, armo una línea sobre el pueblecito y la tomo.
Escucho un poco los murmullos de Fede y su mamá que discuten en la otra pieza. Yo me enciendo un cigarrillo y veo dos petacas de whisky llenas ahí en la esquina de la pieza entre unos discos y ropas de Fede. Agarro una y entra Fede, cierra la puerta, me agarra la cara y me transa. Casi me quita la respiración, se aparta un poco pero no me quita la mirada y con la voz casi quebrada quebrada me dice “amor… vestite… que en una hora me viene a buscar mi primo… y me voy…”
Silencio. “Dale” le digo y lo animo con unas caricias. Silencio.

Me aguanto estas ganas de romper todo. Silencio. Fede se queda ahí sentado en la cama con la cabeza entre las manos.
“Federico, podes venir otra vez?” se escucha decir a su mamá. Él se levanta y sale. Yo me visto y me tomo de una toda una petaca. Aaagh. No aguanto mas lo que esta pasando y quiero estar re loco. Yo quiero estar aturdido porque no voy a poder aguantar verlo irse. El whisky me irrita un poco la garganta y doy el último sorbo. Ufffffff.
Me pongo las zapatillas y ato los cordones, me cierro la bragueta y busco mi merca entre las sabanas. Abro la otra petaca y empiezo a tomarla y entra Fede y me pone las manos en la cintura, me mira tomar y dice “Deja. Vamos a desayunar algo… dale, ya fue.” Y me saca la botellita de la boca. “dale, amor, ya fue” me dice y toma un trago apenas. Lo beso. “dale, Marcos vamos a desayunar algo que ya tengo el bolso y todo allá en la cocina, dale?” lo beso y agarro la petaca de sus manos y hago fondo blanco con lo poquito que quedaba. Fede se sonríe. Yo no voy a llorar, posta, niai.

Ya en la cocina estamos sentados alrededor de la mesa. Julia esta junto a su novio Alberto y Fede toma mate con ellos. Yo estoy re callado al lado de Fede.
Julia rompe los momentos de silencio solo para repetirle a Fede que se comporte bien allá en Córdoba y todo eso. Yo la noto rara… no se, como que esta re enojada con Fede… pero a la vez, supongo, la veo re triste… y bue… al cabo esto es una despedida y Federico es su consentido… a pesar de tantos bardos.

Alberto se disculpa y se retira un rato y yo pienso en las muchas veces que ya estuvimos ahí los tres en la misma situación de tomar mate y que Julia lo reprenda a Fede por alguna de sus bardeadas. Yo estoy re en cualquiera y de repente siento la mano de Fede acariciándome la pierna por debajo de la mesa, nos miramos y me sonríe. Yo ya estoy en cualquiera, aturdido, pensando un montón de cosas y aguantándome las ganas de llorar… re colgado en cualquiera.
Ellos hablan un poco pero yo ni se de que y así pasamos el rato ahí… yo sentado mirándome el barro en las zapatillas y pensando lo mío… ellos discuten de sus cosas.

En eso se escucha que un auto estaciona frente a la casa y toca bocina un par de veces. Julia se levanta de su silla y se asoma por la ventana y hace señas de saludar a alguien afuera. “ahí llego tu primo” dice y sale agarrando un manojo de llaves que estaban sobre la mesa. Fede me arrebata y me besa. Nos abrazamos muy fuerte. Nos besamos y justo entra Julia otra vez a la cocina, nos mira muy seria y dice “dale Federico, que tu primo no quiere pasar a tomar nada. Dice que esta apurado. Dale. Tare tu bolso”

Julia sabe de nuestra historia pero creo que todavía la incomoda vernos cuando nos besamos… no se… como que esta todo bien siempre y cuando no lo demostremos delante de ella… que se yo, pero bue.

Julia agarra una mochila y me da otra mas grande para ayudar a llevar las cosas de Fede mientras él lleva un bolso enorme. Salimos a la vereda.

Yo saludo al primo mientras abre el baúl del Falcon y metemos ahí las mochilas y el bolso. Yo estoy en cualquiera, ellos hablan un poco y se despiden. Fede se acerca y me besa en la mejilla, me busca la mirada y me dice “Yo llego allá y te llamo. Vas a ver que vuelvo en re poco tiempo, posta, vas a ver. Eh, me escuchas? Marcos, cuando llego te llamo. Entendiste? Si?”

Lo veo subir al auto y él nos mira. Julia lo saluda moviendo un poco la mano. El auto arranca. Creo que son como las cinco y veinte de la madrugada, hay un vientito muy fresco. Meto las manos en los bolsillos del lompa y encuentro adentro del izquierdo una de las bolsitas de merca que estábamos tomando y la aprieto un poco. El auto ya doblo la esquina.

No voy a llorar, posta, niai. No voy a llorar pero ¿Qué es volver en “poco tiempo”? ¿Cuánto es “poco tiempo” cuando te sentís tan solo?





Fin.

EL RENGO

Marcos se pelea con diego. Cervezas, un metegol, un pibe fanático de La Renga y sus ganas de tatuarse son la excusa perfecta para coger. Suenan Almafuerte, Patricio rey y sus redonditos de ricota, y Pantera.


De noche. En la casa de Diego estamos solos. Sus viejos se fueron de vacaciones hace una semana.

- cerra el orto! Deja de darme vueltas, Diego decime ya la posta de una…

Diego – cortala, ya fue… que pesado… che, tanto lio por un simple polvo nada mas…

- ¿Qué? Ufff dale, ya que guitarreaste agita las ramas pero agitalas bien piola de una…

Diego – basta che, ya fue Marcos… vamos a comer y ya olvidate… dale…

- que me olvide? Vos sos pelotudo? Diego, decime la posta si me cagaste con ese gil de la ferretería. Dale, decime todo ya que guitarreaste.

Diego - …si, listo. Si. coji con él. Si… listo… y que?...

- pero vos sos un asco de puto. Puto de mierda.
Le digo entre dientes tragándome las ganas de re cagarlo a trompadas por garca. Gil.

Diego - …fue un polvo nada mas… ¿Qué queres? Vos ya dabas asco de borracho. No servias para nada. Te la pasas tomando y drogandote. Bue, me aburrí y le di cabida al pibe… que se yo… ya fue…

- sos un puto de mierda Diego.
Y no me aguanto y le pongo un derechazo en toda la jeta. Loa garro del cuello. Lo mataría. Lo tengo ahí pero lo suelto tirándolo para atrás. Me re putea mal. Gil. Me voy. Sigue gritándome. Ni me doy vuelta, nunca más. Me voy.

Me voy caminando para mi casa. Necesito tranquilizarme. Se me caen las lagrimas de bronca. Diego la re puta conche de tu puta madre. Puto de mierda. Yo sigo caminando. Me prendo un cigarrillo. Diego putazo de mierda. Basta basta, ya re fue. Tengo que cortarla de darme rosca. Listo loco. Ya fue. A olvidarlo. Mejor me compro una birra y a otra cosa.

Al otro dia me voy por la tarde a Moron y como a la noche vuelvo al barrio. Paso por el kiosco de La Gladis y como siempre hay un par de guachines tomando birra o jugando al metegol. Yo paso sin dar pelota y me gritan “Eh! Hermética. Ya no saludas vos?” me doy vuelta y veo que es El Chache. Me dice Hermética porque es la remera que tengo puesta.

Chache – eh! Locura, que caripela guacho…

- desde ayer que estoy como el orto chavon, mejor ni me preguntes. Posta.

Chache – ah bueno, todo piola entonces. Ya fue, tomate un trago.
Me dice y me alcanza una botella de birra. Me tomo unos tragos y se la paso al Marianito que esta ahí. Me prendo un cigarrillo.


Chache – Marcos, queres jugar? Dale que nos faltan contra. Hace como una hora que estamos aca con El Marianito esperando que caiga alguno de los pibes para jugar piola.

- bueno che, yo les hago la segunda pero les aviso que estoy re para atrás.

Chache – jajajaja todo bien. Dale dale que así ya arrancamos. Che, Gladis pasame otra birra y dos fichas pal metegol. Después te pago gorda.

La gorda Gladis sonríe desde la ventanilla y todo bien. Me mira y me dice “como andas nene? Vos no te juntes con estos gatos que son pura vagancia”.

- todo bien Gladis. Son mis amigos.

Chache – viste gorda. Mejor ocupate de lo tuyo y traeme la birra bien fría por favor… y atende a los clientes ahí que los haces esperar por chusmear.
Chache le guiña un ojo y la gorda Gladis le sonríe con picardía.

Marianito – che loco que pinte alguno. Somos tres y nos falta uno. Sino me voy a dormir que mañana laburo. Ya son como las once de la noche guachos.

Chache destapa la cerveza con las muelas, le da un sorbo y le pasa la botella a Marianito y le dice “callate que ahí llego el que juega esta para mi”…

Miramos y es El Rengo que justo viene a comprar al kiosco de La Gladis.
Y justo este pibe tenia que venir! Como me calienta. Esta re fuerte el guacho. Se llama Hernán y tiene como veinte años. Le dicen El Rengo porque es re fanático de La Renga. Él siempre tiene puesta una remera de la banda, tiene todos los discos y los sigue a todos lados. Labura en la verdulería frente a las piletas del Muni… y El Rengo siempre me calentó mucho. Él es alto, flaco, con una mirada siempre atorrante y una boca de lo mejor… es tan masculino, simple, tan chavon pero también con mucha jeta de pillo. Ja!

Se acerca, nos saluda con un apretón de manos y se queda ahí sonriendo y fumando.

Chache – dale Rengo, juga para mi y les hacemos el orto a estos pichis. Goleada la que se van a comer jajaja

Marianito - …pero cerra el culo que te lleno las nalgas de goles a vos y a tu socio. Jajajaj

Reímos, tomamos cerveza y arrancamos al metegol. Yo no puedo evitar mirarle el bulto a El Rengo.
Trato de concentrarme en el juego pero este pibe me puede. Yo lo miro y cruzamos un par de miradas. Trasca El Rengo se acomoda el bulto a cada rato y yo no puedo evitar mirarlo.
Estamos frente a frente. Él juega con Chache y yo con Marianito. Siento la mirada de El Rengo, posta, no estoy falseando niai!
Listo. Con Marianito los goleamos cinco a dos. El Chache se quiere cortar las bolas. Ja!

Chache - …pero che! Tanto que te espere a vos Rengo y al final no me ayudas en nada… que cosa che. Bue, veni Marianito y juga conmigo que vas a ver que ahora si. Me quiero ir a dormir ganado un partidito. Vos Rengo tomatela que no me serviste para ninguna…

Nos reímos. Ahora somos El Rengo y yo contra El Chache y Marianito. El Rengo me mira, me parece que me esta tirando onda. Posta. Jugamos.
Uno a cero. Uno a uno. Dos a uno. Dos a dos. Tres a dos. Cuatro a dos. Cuatro a tres.
Nos ganaron ahí nomás. El Chache festeja. Yo me enciendo un cigarrillo y le doy fuego a El Rengo.

Chache - …bue, locos. Así me quería ir a dormir… ganador! Che, nos vemos mañana. Mi vieja me debe andar buscando. Nos vemos. Che, Marcos, para. Vos mañana vas a estar en tu casa? Me podes tatuar? Ya compre los pigmentos y tengo el dibujo que me quiero hacer. Vos mañana podes?

- mañana? Si. Dale. Pasate a la tarde y lo hacemos. Todo bien. No hay ningún problema.

Chache – joya! Quedamos asi entonces. Mañana paso. Chau muchachos. Che, vos Rengo que te querías escarchar la gamba… bue, ahí lo tenes, Marcos tatúa. Arreglen. Nos vemos guachos.

Chache y Marianito se van. Nos quedamos ahí y ya sale el marido de La Gladis para guardar el metegol. Le damos una mano con El Rengo para entrarlo.
Salimos mientras cierran el kiosco.

El Rengo – así que vos tatuas? Cuanto cobras?

- si. Cobrar? Y no se, depende. Al Chache no le cobro nada porque es mi amigo, que se yo…

El Rengo – pero a mi cuanto me cobras?

- que se yo… que te queres hacer?

El Rengo . me quiero escribir LA RENGA acá.
Me dice palmeándose el frente del muslo derecho.

- ta bien… las letras nada mas?

El Rengo – si pero que sean iguales a las originales, así bien piola. Cuanto me cobras eso?

- que se yo… nada. Es muy sencillo eso que queres. Que se yo… avisame cuando lo queres.

El Rengo – posta? No me cobras nada? Ufff gracias loco. Bue, no se… vos cuando podes? Tengo que comprar la tinta…?

- nah. Yo tengo para eso. No vas a usar mucha tinta. Bueno, no se… cuando vos quieras. Vos conseguime el dibujo de las letras y te lo escracho.

El Rengo – uuuu que copado! Ufff bue, no se. Vos ahora podes? Te jode?

- ahora? …si, que se yo… todo bien. Dale. Pero vos tenes el dibujo con las letras?

Se agarra la remera y me dice “…claro chavon!...” si claro, que boludo yo… por algo le dicen El Rengo… con semejante remera de La Renga. Ja!

- ja! Bueno bueno. Dale, vamos.

Y arrancamos para mi casa que queda a dos cuadras.
En la otra esquina nos cruzamos al Yago y su bandita de chorros. Los saludamos y seguimos.
Llegamos a mi casa. Entramos. Mi vieja ya esta re durmiendo. Vamos a mi pieza. Traigo una botella de agua bien fría de la heladera y cierro la puerta.
Pongo música. “Mundo guanaco” de Almafuerte, va de una.
“…ponete cómodo…” le digo mientras busco la maquinita y las tintas y arreglo los cables y todo eso.
El Rengo se siente en mi cama y mira las paredes de mi pieza. “te cabe el heavy…” me dice mirando todos los postres y fotos de Pantera, Megadeth, Napalm death, Slayer
Y un montón mas que tengo ahí.
“si, a full” le respondo y ya tengo todo listo.

- bueno, yo ya estoy. Fijate donde te acomodas y así empezamos ahora…

El Rengo – si. Me quedo acá recostado nomás, así me ves bien la remera y lo copias tranqui. Ta bien?

- si. Todo bien. Dale…

Nos quedamos mirándonos. Yo estoy con la maquinita y los guantes puesto sentado en una sillita frente a él que esta como recostado en mi cama.

El Rengo - …uuu si. Jajaja que colgado que soy… che, me tengo que sacar el pantalón porque lo quiero acá, te dije… no te jode, no?
Me dice tocándose el frente del muslo derecho y claro, el pibe tiene un jean y tiene que sacárselo nomás… este chavon me pone al mango.
Él se tira un poco hacia tras y se desprende el cinturón y se abre el cierre de la bragueta y se baja el lompa. Uffff tiene un slip blanco. Se me re esta parando la verga.
Se deja el pantalón todo arrugado por los tobillos y se acomoda bien. Yo me acerco mas hacia él y arrancamos. Ahora no se como mierda seguir…
Tengo el bulto del pibe a menos de medio metro de la cara… hasta puedo oler como un perfume que me pone a mil.
El Rengo me mira. Yo le miro la remera y voy dibujando con la maquinita despacio para no hacer cagada… pero el bulto del pibe me pierde, trasca El Rengo tiene la piel re suave y lampiña.

“Todo bien?” me pregunta. Parece que me ve agitado.
“Si. Claro” le digo tratando poner
Toda latención posible en el tatuaje y agarrándole un poco mas el muslo para afirmar el trazo.
No hablamos. Solo suena la banda de Iorio y el zumbido de la maquinita escarchando.
Yo la tengo re dura y me jode un poco. Me hago el boludo y me acomodo un poco la pija para que no me joda tanto. Me parece que El Rengo se re dio cuenta pero no dice nada. Sigue mirándome y se acomoda el bulto y nos miramos. Yo sigo en el tatuaje. Le miro el bulto y veo que se le paro, en el slip se marcan los contornos de los huevos y la verga bien dura hacia el costado.

El Rengo – che loco… disculpa… no se… se me re paso de una. Disculpame, se paro…

Yo lo miro y no digo nada. Me sonrío y sigo terminando el tatuaje… pero que buena pija que tiene! La punta se le asoma por la cintura del slip. Zarpado. Uffff.

- para para boludo… ufff loco. Se me re paro a mi también.
Le digo apagando la maquinita y tocándome el bulto.
Nos miramos.

El Rengo – si? Bue… nos re pinto la calentura, no loco? Yo… no se… estoy re pajero capaz… y me calente mal.

- yo también, boludo. Además tengo tu verga re dura casi en la jeta…

Nos miramos. Sonreímos…

El Rengo - …y bue. Pinto. Pelá loco.

Lo miro fijo. Golazo. Me sonrío y me saco los guantes y dejo la maquinita con cuidado ahí nomás. Me levanto de la sillita y saco la pija bien dura.
Nos miramos.
“Ahí esta…” le digo invitándolo sin vueltas.
Me la mira un toque y se acerca. La agarra y me empieza a pajear despacio y nos miramos.
Yo me saco la remera y le pongo suave las manos detrás de la nuca y lo acerco despacio para que se la meta en la boca.
Ufff la chupa re joya El Rengo. Alto pete me hace mientras se pajea re despacio y le saco la remera. Transamos.
Yo se la chupo bien piola. Caricias. Besos. Nos pajeamos y acabamos juntos.
Re joya.

Yo me limpio la guasca con mi remera de Hermética y El Rengo ahce lo mismo pero con su remera de La Renga. Uffff golazo.

Nos prendemos un cigarrillo, nos reimos de unas boludeces y pongo otro disco. Vulgar display of power de Pantera. Grosso.

Me dice que este disco le gusta. Hablamos algunas giladas. Todo bien. Seguimos en bolas. Es bien copado el pibe. Se mira el tatuaje y lo toca muy despacito. Dice que le re gusta, que le quedo re joya… esta contento el guacho.

Le aclaro que todavía faltan dos o tres trazos mas para terminarlo joya joya, pero nos quedamos un rato mas ahí tirados en mi cama mirándonos, hablando boludeces y transando a full.

Le digo que mejor le voy a terminar el escracho ahora así todavía tiene tiempo para dormir unas horas para ir a laburar en la verdulería pero me dice que hoy no labura… que todo bien para quedarnos así un rato piola. Turro. Le re cabe la pija. Joya.

Hablamos de su laburo, de su novia, de su viejo, de las bandas que me gustan, de los recitales a los que cada uno fue y esas cosas. Copado.

Transamos re piola y pongo otro disco. Me pide si me copo con algo de los redonditos. Ja! Como no… La mosca y la sopa, va de primera.

Al rato arrancamos tranca a terminar el tatuaje.
Todo tranqui. Me dice que mañana no labura porque pidió el día libre para irse a Tandil a seguir a La Renga, que se toma el micro a las tres de la tarde en Merlo, que va con su novia y que esta re copado con el nuevo disco y me habla de las canciones y todo ese rollo de puro fanático. Yo lo escucho y él habla y habla pero no deja de mirarme la boca y la pija.
Es muy lindo pibe El Rengo. Curtimos a full y se queda a dormir un rato.

Mañana La Renga toca en Tandil y El Rengo ya tiene su entrada y un lugar en el micro.
Mañana él va a estar allá, como hoy acá, haciendo el aguante.




Fin.

DOS CORAZONES

Marcos y Gusti se conocen y se enamoran. Visitan el cementerio y compran ramos de flores. Gusti afana una panadería. Después curten y buscan una birra bien fría.



Ya había atardecido y estaba casi oscuro. Me quede parado contra una persiana en la esquina y de repente El Gusti vuelve corriendo y me tira del brazo al pasar y dice “dale! Boludo corre corre… para las piezas! …” y arranque a correr detrás de él.
Corríamos y éramos dos rayos por casi diez cuadras. Reíamos agitados esquivando autos y gentes. Llegamos y saltamos el paredoncito y nos metimos de una las piezas esas abandonadas del campito del golf. Estamos re agitados… riendo… cagados de calor y nos sacamos las remeras.

Gusti- faaa, boludo… re piola… yo te dije ¿o acaso no? Ufff, jajajajaj… les re cabio a esas panaderas de mierda… jajaja! Entre y les dije “dame toda la guita, dale dale o te quemo” y les amagaba que tenia el fierro en la cintura. Faaa… las hubieras visto! Se cagaron todas y me dieron todo lo que tenian en la caja. Re piola, yo te lo dije, o acaso no? Si yo te prometo algo te lo consigo, o no? …ja! Yo te lo dije guachin… y yo te cumplo, siempre, ufff todo.

Dice y se me tira encima y me empieza a besar y a franelear todo. Transamos a full. Curtimos y ya casi no había luz en la pieza esa pero no nos importaba nada de nada.






El Gusti y yo nos conocimos hace muy poco pero nos enganchamos mucho ni bien nos frecuentamos un par de dias.
La primera vez que nos vimos fue en la casa de Chipo, un amigo mio. Yo me llegue porque andaba por ahí cerca y al Chipo no lo veia hace unos meses… como desde que se hiba a chorear el maxikiosco ese en Rafael Castillo. Bueno, asi llegue, solo de pasada.
“Chipo…” llame cerca de su ventana que da a la vereda y a esos rosales medio secos que se le amontonan ahí. Él corre un poco la cotinita marron de la ventana y mira desconfiado pero me reconoce y dice “Eh! Ahí voy.” Me prendo un cigarrilo y ahí viene El Chipo en cueros, abriendo el portoncito y diciendo “Eh! Perdido, te acordaste de mi rancho. Llegaste justo, estamos tomando unas viras con un amigo, dale veni, pasa. Che, que bueno verte loco.” Entramos hablando a su pieza y ahí, justo sentado en ese sillón rojo todo destrozado, estaba acomodado El Gusti. Nos saludamos con un apretón de manos y unas rápidas miradas que intentaban disimular la minuciosa inspección que cada uno hacia del otro. El Chipo le cuenta al Gusti que yo soy un amigo y que habíamos compartido muchas secuencias… algunas buenas, malas y otras bien bien jodidas. Hablamos de todo, nos reímos y ya tomábamos la tercera birra entre un montón de colillas ahí en el piso.
El Gusti y yo cruzamos un montón de miradas mientras hablábamos de algunas boludeces y fumábamos un porrito que armo él. La verdad que yo nunca lo había visto antes pero parecía un pibe bien común, lindo, con la voz clara y bien grave, delgado y bien morochito… bah, del mismo color que somos casi todos los pibes en este barrio.
Así fue, masomenos, la primera vez que lo vi y si… creo… me gusto un poco. Con los días que vinieron ya nos entramos un par de veces fumanchando en el campo de Los patos, cerca de los juegos para no hacer mucha bandera y flashearla bien piola mirando los autos que pasan allá en las calles de los costados del campo.
La verdad que ni se como empezamos a curtir… pero me parece que fue esa tarde que El Gusti vivo a mi casa y se quedo un buen rato y que se pago cuatro cervezas y que estaba fastidiado porque tenia los pies todos ampollados por esas Niké todas viejas que ya le lastimaban. Él se quedo toda esa noche en mi casa. Hablábamos sin parar y ya estábamos re locos entre las birras y el porro. Nos tiramos en mi cama, uno al lado del otro, a tomar un Fernet que yo tenia. Y ahí, en el flasheo, cagandonos de risa, llorando o que se yo, ya lo tenia al Gusti encima mío besándome el cuello… y transamos y curtimos… re locos.

A la mañana él se fue de mi rancho muy callado… cosa que me parecía imposible en él… pero así se fue, como raro, callado, sin hacer esos chistes ni su parloteo habitual. Y no volvió por muchos días para acá.
Pero un día apareció de vuelta en su bici, así como si nada, como hace unos días, sonriendo con toda esa boca y pidiéndome unas botellas para ir a traer unas quilmas. Y empezamos a vernos todos los días y a transar y a curtir y a decirnos “si, te quiero.” Y estaba todo bien, posta, todo re bien.
Hacíamos la nuestra, re bardos los dos, nos reíamos de todo, estábamos casi siempre juntos y todo bien, posta, todo re bien. Los dos teníamos la misma edad, las mismas calles en común y esa libertad brutal de los que están solos… porque así estábamos… si a los dos ya se nos habían muerto los viejos.
Así, un día, de esos en los que Gusti tenia mucha guita de sus choreos pero que andaba medio bajón, mientras veíamos cuanto faso y merca iba a comprar, agarro un billete de cincuenta pesos y lo doblo y acercándomelo me dijo “toma, guardalo. Eso no lo vamos a hacer gilada. Mañana vamos al cementerio y con eso les llevamos unas flores a nuestras viejas, a la tuya y la mía, si? Dale, guardalo para mañana.”

Eso me engancho mucho mas a él. Y fuimos al cementerio a visitar a nuestras viejas. Compramos unos ramos bien grandes en el puestito de la entrada y elegimos para cada cual sus flores favoritas: rosas blancas para la mamá de Gusti, y jazmines y gladiolos para la mía.
Y ahí estábamos, re callados, sin llorar ni decir nada de nada. Un rato largo en la sepultura de cada una, callados. Uno al lado del otro, callado, dejando al otro un rato con el recuerdo de su mamá y después, asi como si nada, uno decia secamente “vamos” y nos íbamos caminando despacio, saliendo hacia la calle del centro entre las parcelas, perdíamos un cigarrillo y seguíamos callados… sabiendo que estábamos solos de verdad.
Así íbamos al cementerio casi una vez por semana, siempre que tuviéramos guita para llevarle a cada una de nuestras viejas, unos ramos bien grandes de las flores que fueron sus favoritas.
Los vicios, la calentura y el bardo nos hizo compañeros, secuaces y amantes… pero esas idas al cementerio nos hizo hermanos, hijos, solos.

Ya no habia luz en esa pieza abandonada del campito del golf. Ahora estabamos mas tranqui… un polvo de parados nos bajo bien piola.

Gusti- faaa que calor, che… vayamos a buscar una birra bien fria ahora… para para, veamos cuanta guita agarre recien.

Busco el encendedor en mi bolsillo y lo enciendo para iluminar un poco el bollo de guita que saca El Gusti desdoblando algunos billetes.

Gusti- uuuuu re piola… che, aca hay como quinientos pesos, facil… jajajaja re bueno, jajajaja! Viste, yo te dije y yo te cumplo, ja! Vos querías merca, bueno ahora vamos a comprar! Viste, vos conmigo no te vas a quedar manija niai… nunca.

Apago el encendedor y transamos.

Gusti- eh loquito, dale dale, zafemos de aca. Dale que me muero por una birra bien pero bien fria, dale dale. Y de ahí vamos directo a lo de El Uruguayo a pegar una buena piedra de la pura… para que tomes vos mi amor. No me gusta verte manija, si total es re facil para mi… voy pongo caño a un negocio y listo… ya tenemos guita! Jajajaja te re amo, boludo.

Tranzamos. Nos ponemos las remeras y salimos de las piezas entre los yuyales hacia el paredoncito que saltamos para ya estar en la calle. Gusti hacia las cuentas en voz alta de lo que iba a comprar. Caminábamos tranquis y vemos un kiosco ahí nomás, paramos y Gusti pide la Quilmas mas fría que tenga. La piba que atiende le dice que le tiene que cobrar dos pesos mas porque no trajimos envase. El Gusti se sonrie y dice “dale, todo bien. Tambien dame dos Marlboro de veinte… y un bocadito de estos Dos corazones. Cuanto es todo?” le pregunta a la piba mientras saca el bollo de guita del bolsillo y me mira sonriendo. Paga y salimos.
En la vereda me regala el Dos corazones diciéndome “te quiero, guachin.”
Guarda los paquetes de cigarrillos en los bolsillos de sus bermudas y cuando se dispone a destapar la cerveza con las muelas parace que se acuerda de algo y exclama “uuuuuuuu para para…” y deja la botella en el piso y vuelve a sacar el bollo de guita y agarrando un par de billetes me dice “toma, guardalos,. Hay como sesenta pesos ahí, no? Bue, así mañana…” y lo interrumpo completando su frase…

- …si. Así mañana vamos al cementerio a llevarles unos buenos ramos de flores a nuestras viejas.




Fin.

martes, 8 de septiembre de 2009

Los pibe de mi barrio

Los pibe de mi barrio quieren condenarme. Quieren enjaularme el pecho. Quieren amarrarme del deseo. Ellos quieren y yo no se.

Los pibe de mi barrio andan en cueros cuando hace calor. Alardean la piel morocha, el cuerpo flaco y endurecido, la boca grande y la lengua bruta.

Los pibe de mi barrio andan de gira todo el día. Tomando cereza, fumando porro, junando la esquina y hablando giladas.

Los pibe de mi barrio son hermosos. Machitos, reos, negros cabeza, guachines con el corazón que les patea a lo bruto y a lo feroz.

Ese es el corazón negro, bien negro y cabeza, que los pone de gira todos los días. Esos, esos son los cuerpos endurecidos al palo en la esquina que andan en cueros cuando hace calor. Esos, esos son los pibe alardeando la piel morocha y el aliento de cerveza. Esos, esos son los pibe feroces de mi barrio. Los que amo.

Ellos, esos brutos, esos pendejos, todos. Ellos quieren condenarme. Por eso andan en cueros cuando hace calor. Para enjaularme el pecho. Por eso alardean la piel morocha. Para amarrarme del deseo. Esos. Esos negros cabeza. Hermosos. Quieren atarme y yo no se.

Es que me gusta tanto verlos.
Flacos y endurecidos, reos y brutos. Tan pendejos. Tan hermosos. Los amo.
Y yo se que pasaría la vida admirándolos como embobado. Al palo. Enamorado.

Los pibe de mi barrio se propusieron no dejarme ir. Por eso andan en cueros cuando hace calor. Para tenerme mirándolos como embobado. Porque ellos saben que el sudor que les brilla a la siesta en la esquina, es como un faro para mi.

Los pibe de mi barrio quieren condenarme y yo no se.
Pero yo quiero todo. A todos. Quiero a los pibe de mi barrio y también los quiero a los otros. A todos.
Y por eso no puedo quedarme condenado solo a los pibe de mi barrio. Enjaulado solo con los pibe de mi barrio. Agarrado solo por los pibe de mi barrio. Yo lo quiero todo. A todos.

Y voy a tener la fuerza de voluntad de irme a buscar otros pibe. Si. Porque yo los quiero a todos. Machitos. Reos. Negros cabeza. Guachines. Brutos. Feroces. Por eso voy a tener la fuerza de voluntad de irme a desear a todos. A todos esos otros pibe de piel morocha, de cuerpo flaco y endurecido, de boca grande y lengua bruta.
Porque yo los quiero a todos. Por eso me voy a ir a buscar a todos esos pibe a los que el corazón les patea bruto y feroz. Si.

Los pibe de mi barrio son hermosos. Pero yo se que hay mucha mas hermosura en otras calles. En casi todas las calles. Aunque en mi barrio los pibe sean como un faro. No. Yo voy a irme. Porque los pibe de mi barrio se propusieron condenarme y yo... yo no quiero.

Yo quiero irme a buscar otros. Porque estoy casi seguro que en algún otro barrio, en alguna otra calle, hay UN pibe, UN SOLO PIBE, al que el corazón le patea mas bruto y feroz que a todos.
Y yo me voy a buscarlo. Para que me condene, para que me agarre del deseo y para que me enjaule, bruto y feroz, a su pecho.

lunes, 27 de julio de 2009

POSTAL DE NAVIDAD DE UN PUTO EN MERLO*

Che, Emanuel, estoy rehabilitado y viviendo en la calle nueve junto al negocio de libros porno en la avenida del centro. Si, pare con la falopa y deje de tomar whisky y mi tipo toca la guitarra y trabaja manejando una camioneta. Dice que me quiere y me regalo un anillo que era de su madre y me lleva a recitales cada sábado a la noche y che, Emanuel, siempre pienso en vos cuando paso por la estación de Once y paso por la esquina del departamento de ese tipo con el que solías vivir y yo todavía tengo ese disco de los Redonditos de ricota pero alguien me robo el tocadiscos, que te parece eso? Che, Emanuel, casi me vuelvo loco cuando lo atraparon a Rodri asi que volví al Tigre a vivir con los míos pero todos aquellos que conocía estaba muertos o presos asi que volví a Merlo y creo que esta vez me voy a quedar. Che, Emanuel, creo que estoy feliz por primera vez desde mi “accidente” y desearía tener toda la guita que solía gastar en falopa. Compraría una tienda de discos usados y no tendría que vender ninguno tan solo escucharía un disco distinto cada día dependiendo de como me sintiera. Che, Emanuel, por amor de Dios ¿queres saber la verdad? No tengo un marido, él no toca la guitarra y necesito dinero prestado para pagarle al dealer y che, Emanuel, voy a estar libre este sábado a la noche, porfavor venia a verme.

IOSHUA
www.antidisenio.blogspot.com

*esto es una adaptación del poema POSTAL DE NAVIDAD DE UNA PUTA EN MINNEAPOLIS de TOM WAITS

jueves, 18 de junio de 2009

LA DIEGO

El Diego siempre fue un chavon raro. Un pibe muy burlón por demás, pero como siempre fue asi de grandote nadie se le planto y el Diego asi afianzo su berretin de burlón.
Yo nunca tuve mucha onda con él pero tampoco nos caíamos mal... que solo nos saludábamos bien, casi como amigos, como vecinos... en verdad.
Vivimos en la misma cuadra y desde que me acuerdo el Diego siempre fue a si de maldito con todos... y si se la agarraba con alguno de los pibitos en particular, bue, ya estaba jodido ese porque el Diego tenia el venenoso ingenio de acuñar sus burlas mas terribles con las características mas evidentes de su eventual víctima.
Asi de pelotudo era el Diego.

A todos los pibes nos gasto algunas de sus insoportables bromas alguna vez... que algunas estaban buenas y nos reíamos todos un rato, pero siempre él se pasaba y ya atacaba hasta el hartazgo con su bozarron y esas carcajadas de hipopótamo. Y nadie parecía tener tanta jeta para ponerce a devolverle sus burlas... porque el Diego no era ningún Adonis con esos ojos saltones, esas mejillas gigantes y rosadas y, uh!, ni hablar de ese pelo ridículamente tan enrulado y marrón, pero bue... el Diego se imponía con sus burlas y con su bozarron y con su metro ochenta y esos brazotes que agitaba y prometían piñazos a cualquiera.

Pero todo iba a cambiar el domingo ese en la casa de Mauri, uno de los pibes de la cuadra que tiene una pileta de lona bien grande en el patio del fondo.
El Mauri no los invitaba a todos pero tampoco les negaba que entren y estén un rato en su pileta al rayo infernal del sol. El domingo ese los padres de Mauri no estaban asi que el patio era todo un quilombo de pendejos todos gritando y corriendo y chapoteando y asi todos. Creo que fue el primer día de mas calor de ese Enero.
Tal que todos estabamos ahi bronceándonos y jodiendo. Hacia un rato ya que había llegado el Diego, pero estaba tranquilo bronceando su barriga con otros dos grandulones de la otra cuadra. Asi todo estaba bien... pero el Diego no se pudo aguantar su genio y se la agarro con un morocho bien flaquito y con anteojos que estaba ahi jugando sobre las baldosas mojadas. Yo seguí en la mía con otros pibes y solo escuchaba de a ratos las carcajadas aparatosas del Diego, pero ni le prestaba atención porque entonces era peor... yo lo conocía muy bien en eso: si el Diego veía que tenia publico se ponía mas cruel.
Yo vi que el morochito estaba avergonzado y ya no jugaba tan entusiasmado como hacia un rato. El Diego casi a su lado le seguía haciendo burlas. En un instante el Diego muy atrevido estira el brazo hacia la carita del morocho diciendo “che, africanito, vos sin estos anteojos no ves una mierda, no? A ver dámelos” y el pibito se asusto y se movió muy rápido para apartarce de la mano de Diego, pero las baldosas estaban muy mojadas y el morochito resbalo y se cayo ahi mismo.
Silencio y todos giraron sus ojos hacia ahi y nada ni nadie se movió en ese instante. Paso que cuando el morochito se caía manoteo para cualquier lado y se fue al piso agarrando y arrastrando hasta los tobillos la bermuda de fútbol que tenia Diego. Y no lo podíamos creer: el Diego quedo ahi en el patio a la vista de todos casi desnudo... de no ser porque debajo de la bermuda de fútbol tenia puesta una bombacha roja tipo colaless con puntillita en los bordes! Ja!

IOSHUA

GAUCHO DO INFERNO

Autobiografía como poema en prosa sobre Ioshua y Joao Moojen. Una rosa, alcoholismo y casi una sobredosis cuando Emanuel se va a El Bolsón. Homoerotismo, estaciones de tren y mucha pero mucha cocaína.





Voy a predecirte algo:
Una mañana él te va a regalar una rosa, te invitara unas cervezas y vas a saber que hay algo importante en que sea un hombre y que vos ni te acuerdes donde pasaste la noche.
Vos, que ni sabes con cuantos tipos te acostaste y sentías que les pagabas con lo que tenes. Pero no a él, no esta vez. Porque él te invitara a comer y cocinara solo para vos, te dará sus cervezas, te invitara a su cama y no va a tener miedo de morir con vos y por eso te va a dar toda la cocaína que tiene.
Te va a decir que vos le gustas, que te ama. Te lo va a decir muchas veces y una noche te va a preguntar cuanto mide tu pija.

Pero
Vas a pasar días y noches enteras perdidamente borracho y perdidamente enamorado pero no de él.
Aunque en una fiesta habrá muchachas que te lo van a preguntar, que te van a preguntar si acaso entre él y vos... pero no. No les vas a responder porque no se lo merecerán. Que ellas se conformen con verte muy borracho, arruinado, zarpado de todo y haciendo el ridículo... pero que no sepan nada de tus sentimientos nunca.
No te va a importar que te vean como a un desgraciado alcohólico, siempre y cuando que jamas sepan nada de tu verdadero corazón.

Pero habrá mas
Porque vas a pasar días enteros sintiéndote tenazmente solo y vas a vomitar algunas veces y otras tantas vas a llorar pero nada va a cambiar: vos vas a seguir perdidamente enamorado pero no de él.

Él va a ser todo el hombre que alguna vez soñaste: generoso, temerario, inmaduro y con un disco de The Velvet Underground. Pero no. Él tiene algo que te recuerda a tu padre y eso te tranquilizara porque asi siempre vas a tener un verdadero pretexto para odiarlo y no sentirte tan canalla.

Te juro
Que una noche él rayara una tiza de merca y entre los dos van a peinar las rayas. Él te va a adormecer con su palabrerío que tanto te hace acordar a como lo hacia tu padre. Van a tomar cerveza y a jalarce todo. Vas a estar muy callado pero él hablara sin parar.
Tu corazón va a empezar a galopar mas y mas rápido y vas a sudar mas y mas frío... como tantas veces antes.
Él no va a parar de hablar y vos vas a seguir callado tomando una raya mas y vas a espiarte un poco cada vez que te pongas a jalar sobre el espejo. Tu corazón seguirá galopando mas y mas rápido y vas a sudar mas y mas frío, como él, que no deja de hablar.
Un cigarrillo mas que, por supuesto, vas a tizarle la punta con cocaína primero.
Él rayara un poco y otro poco mas, vas a peinar una línea y otra línea mas, tomaran un poco de cerveza y otro poco mas, él va a seguir hablando un poco y otro poco mas... mientras tu corazón como endemoniado seguirá corriendo y correrá un poco y otro poco mas y vas a tener algo parecido al miedo que debe sentir un condenado pero no vas a parar de tomar... porque ya a veces esperaste eso y a veces fue apenas una intuición... un furor de pánico que pasaba a prometerte que el fin había llegado... pero no... no con él.
Aunque ambos jueguen a contraer un pacto inquebrantable, aun asi, no va a ser con él. Aunque nunca antes hayas caminado con nadie por ese furor... aun asi no vas a morir con él... no esa noche... porque esa noche va a ser como cualquier otra noche en la que es fácil entregarce a los brazos de cualquiera por un abrazo... y seria estúpido pero ¿porque dormirían solos luciendo tan hermosos juntos con sus corazones como endemoniados y ese leve temblor que les va a hacer rechinar los dientes? Ni ustedes va a saberlo aunque estén por morir juntos.

Porque vos
Que bien sabes de esos recorridos de miedo por los campos alrededor de las estaciones de tren de Moreno o Tigre o Libertad, solo tenes que saber que eso va a pasar la misma noche en que Emanuel se vaya a El Bolsón. Y que vas a tener miedo como un condenado pero no vas a parar de tomar, de sentirte tenazmente solo ni de seguir perdidamente enamorado pero no de él... aunque él parezca todo el hombre que alguna vez soñaste... cuando todavía soñabas.
Pero no, esa noche no, mi amor.
Porque todavía habrá mas.
Vas a seguir pagándole a cualquiera con lo peor que tenes, vas a seguir sintiéndote tenazmente solo, vomitando algunas veces y otras tantas vas a llorar y el whisky te prometerá un olvido que nunca va a llegar. Y vas a hacer correr a tu corazón como endemoniado una noche y otra mas y no vas a parar de estar enamorado pero no de él.
Vas a verte terrible pero nada a parar las noches ni a perturbar la carrera endemoniada de tu corazón que va a seguir perdidamente enamorado pero no de él.
Vas a sentirte mas solo caminando drogado con tu remera manchada de semen y apretando una botella de cerveza mas de lo que nunca nadie apretó tu mano.
Vas a pasar años de miedo, noches enteras desbocado intuyendo que el final por fin llegar y sabiendo que hay algo importante en que seas un hombre y que hayas cogido tanto anoche.
Porque vos
Que muy bien sabes de esos recorridos de puro solitario cogiendo por el centro en departamentos de tipos que no son nada de lo que alguna vez soñaste. Vos ahora tenes que saber que una tarde fumando un cigarrillo en el anden de la estación de Morón, con gusto a pija en la boca, luciendo terrible y con un cabron dolor de cabeza... ahi vos te vas a dar cuenta que todo esto ya te ocurrió.

IOSHUA